Las tuberías multicapa, por definición, se fabrican alternando distintos materiales para combinar sus características químicas y mecánicas.
Tanto Pexal como Mixal tienen una capa interna de polietileno reticulado de tipo B. Una película adhesiva une esta última a la capa intermedia, de aluminio. Antes de la capa externa del tubo se aplica otra película adhesiva, de polietileno de alta densidad para la gama Mixal, y de nuevo de PE-Xb si hablamos de Pexal.
Lo que garantiza la calidad y fiabilidad a lo largo de todo el ciclo de vida de la tubería es, ante todo, la selección de las materias primas. Inmediatamente después viene la precisión del mecanizado.
¿Qué es el polietileno reticulado y cómo se produce la “reticulación”?
Las capas internas de Pexal y Mixal y la externa de Pexal se fabrican con polietileno reticulado de tipo B: en el mercado hay tubos multicapa que se fabrican con distintos tipos de mecanizado, que se remiten a una norma - la alemana DIN 16892 - que estipula el "grado mínimo" de reticulación en función del método aplicado.
De hecho, hay distintos procesos que conducen a un resultado similar: los principales métodos utilizan peróxidos (reticulación de tipo A), silanos (tipo B), radiaciones (tipo C) y compuestos azoicos (tipo D). Hay que dejar claro que las distintas tecnologías no conducen a un resultado mejor o peor: la calidad del producto depende directamente de la precisión y la conformidad del mecanizado respecto a lo que indica la norma de referencia.
Valsir propone, como se decía, PE-Xb. Este tratamiento se lleva a cabo una vez que se termina de fabricar el tubo, utilizando tanques de vapor específicos. La decisión de llevar a cabo el proceso internamente está vinculada al completo control y trazabilidad de cada etapa de procesamiento, y se traduce en la garantía del pleno cumplimiento de las normas.
Prestaciones que combinan las ventajas de cada material
La peculiaridad de las tuberías multicapa, como ya se ha dicho, es que son capaces de aprovechar de forma sinérgica las prestaciones de los materiales utilizados: por ejemplo, la resistencia natural a la corrosión de los plásticos y la estanqueidad del aluminio frente a presiones y temperaturas elevadas.
Incluso el adhesivo que une las distintas capas de material es fruto de años de investigación para optimizar la estanqueidad a lo largo del tiempo sin interferir en las características dinámicas del tubo multicapa.
El núcleo de la solución multicapa sigue siendo el aluminio, es decir la capa intermedia de los tubos. Se trata de aluminio virgen, cuya flexibilidad se mantiene uniforme mediante soldadura TIG a tope: de este modo, el grosor es constante en toda la sección del tubo, que no tiene puntos más o menos rígidos que otros (con evidentes ventajas en las operaciones de colocación).
La capa de aluminio encuentra uno de sus mayores puntos fuertes en la barrera de luz y de oxígeno, que dificulta la proliferación de algas y bacterias dentro de los tubos.
Solo una breve observación, sin embargo, en cuanto al polietileno de alta densidad que forma la capa externa de la gama Mixal. Hay que tener en cuenta que la principal aplicación, en este caso, es el sistema de calefacción o refrigeración radiante: esto significa que el instalador tendrá que hacer muchas curvas, y la manejabilidad del tubo multicapa se convierte en la característica práctica más importante. En este sentido, se prefiere, por tanto, el PE al PE-Xb porque es más flexible.
Las diferencias (y similitudes) entre Pexal y Mixal
Una de las diferencias fundamentales entre Mixal y Pexal es el grosor del aluminio. Hemos dicho que Mixal, por motivos relacionados con el tipo de aplicación más habitual, premia la flexibilidad, por ello utiliza una capa de aluminio más fina (sin comprometer en absoluto su resistencia mecánica).
Otro punto distintivo es la gama. Mixal se fabrica de 14 a 32 mm de diámetro, mientras que Pexal llega hasta 110 mm para satisfacer un abanico más amplio de exigencias relacionadas con la construcción.
Por otra parte, ambas soluciones se utilizan en una gama muy amplia de aplicaciones, de los sistemas sanitarios a los de calefacción a alta y baja temperatura (es decir, sistemas radiantes pero también radiadores), pasando por el aire comprimido; ambas gamas están homologadas en las 4 clases previstas por la normativa de producto, y según las normas más estrictas (10 bar).
Las tuberías multicapa son inmunes a la corrosión y son la mejor alternativa a las tuberías metálicas también por la ligereza de los materiales, que a bordo de una embarcación se refleja en el consumo y el rendimiento.
Debido a la gran variedad de usos, tanto Pexal como Mixal están disponibles en barras o rollos, hasta longitudes de corte de 500 m; los tubos también se suministran revestidos con vaina termoaislante de 6 a 13 mm (y de 25 mm bajo pedido) o con vaina corrugada simple o doble (es decir, con doble tubería incluida).
Multicapa también significa conexiones
Cuando hablamos de "sistema multicapa", en realidad nos referimos no solo a las tuberías, sino a una enorme selección de conexiones y accesorios adecuados para cualquier instalación.
De los conexiones roscados de latón más clásicos (Pexal Twist) a las soluciones a presión, que una vez más incluyen las gamas de latón (Pexal Brass), pero también la variante de plástico más moderna que utiliza el "tecnopolímero" PPSU (Bravopress).
De nuevo respecto a los polímeros, cabe destacar que Pexal es el único producto que permite utilizar conexiones de paso total (PexalEasy) que, a diferencia del resto de soluciones, evitan la reducción de la sección de paso en la boquilla.
Por último, el material plástico de los conexiones incorpora algunos de los puntos fuertes del tubo multicapa: prevención de la formación de incrustaciones, pérdidas de carga reducidas, resistencia química incluso a los tratamientos más severos (por ejemplo el saneamiento de las redes de distribución de agua en hospitales).